Parpadeos sutiles librando dulces batallas con el tiempo,
labios húmedos e hinchados por el calor de la pasión,
fricciones encubiertas por cotidianos movimientos,
deseos silenciados emitiendo clandestinas señales de amor.
Miradas furtivas escaneando contornos prohibidos,
palabras temblorosas traicionando nuestros disimulos,
sudoración delatora de pensamientos lascivos ,
avidez de caricias en la piel de un cuerpo desnudo.
Sueños encarcelados en el silencio de la noche ,
platónicos sentimientos manifestando su rebeldía,;
experiencias vividas ejerciendo presión en los temores
a la insurrecta subversión del pasado en nuestra vida.
Sensaciones desbocadas buscando ansiosamente una salida,
alterando la armonía con síntomas de necesidad humana,
buscando en la soledad algún resquicio de compañía
le robamos a los sueños lo que falta en nuestra cama.
Maldita sustitución alimentando nuestras carencias,
imaginación a cambio de la libertad de un sentimiento
que refrenado y reprimido bajo el poder de nuestras riendas,
enmudece en nuestro corazón, enloquecido, ávido y sediento.
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